El abordaje videolaparoscópico de las eventraciones ha ido ganando lugar en los últimos años, existiendo controversias en cuanto material protésico a utilizar, posicionamiento y contacto con las vísceras.

Describir nuestra técnica y los resultados obtenidos en el abordaje videolaparoscópico de las eventraciones.

61 pacientes con eventraciones intervenidos quirúrgicamente desde enero de 1998 hasta enero de 2006.

Evaluamos sexo y edad; ubicación y tamaño de la eventración, posibilidad de recubrimiento de la prótesis; material y tamaño de la misma. Conversión. Morbi-mortalidad. Estadía hospitalaria y recidiva.

62 procedimientos (un paciente con dos procedimientos); 37 hombres y 24 mujeres; edad media 53,8 años (18 – 88). La eventración ubicada por encima de la línea biilíaca se registró en 35 oportunidades (56%); con un anillo promedio de 5 x 7 centímetros, 19 casos (31%); con posibilidad de efectuar el recubrimiento en 42 (69%). Las prótesis de polipropileno se utilizaron en 42 procedimientos (69%), utilizando el epiplón mayor para cubrirla en 41 y en el restante se utilizó el saco eventrógeno; el tamaño de la malla más frecuentemente utilizado fue de 15  x 10 centímetros, 14 (23%). No hubo conversión. Morbilidad en 8 (13%). No  registró mortalidad. La estadía hospitalaria fue de 1,11 días (1–4). Recidiva en 3 pacientes (5%).

El abordaje videolaparoscópico de las eventraciones en un grupo seleccionado de pacientes es una opción valida con bajo índice de complicaciones mayores. La colocación de prótesis de polipropileno en posición intraperitoneal es posible  en casos seleccionados.