Antecedentes: Los traumatismos
penetrantes cardiacos, son un desafió para él
medico emergentólogo. Tambien se debe considerar las
complicaciones inherentes a la actuación directa sobre
el corazón, secundarias al tratamiento de reparación
quirúrgica, siendo la luxación una posibilidad.
Existen controversias sobre la forma de cierre pericardico.
Objetivo: Establecer conductas en el manejo del trauma
cardiaco.
Lugar de aplicación: Centro de Emergentologia y
Trauma.
Diseño: Retrospectivo, observacional. (Lamina)
Población: Presentación de un caso.
Material y método: Masculino de 31 años,
ingresa al shock room, por herida de arma blanca en región
precordial, obnubilado, sudoroso, T.A: 100/60mmhg, F.C.130
lat/min., triada de Beck +. Reanimación según
normas del A.T.L.S., ecocardiograma el cual detecta liquido
pericardico aumentado. Se realiza toracotomia antero-lateral
izquierda, 5to EIIzq., se abre pericardio en forma longitudinal
izq. constatándose lesión de ventrículo
derecho de 2cm, cardiorrafia con polipropileno y capitones
con dacrón, ventana pericárdica amplia y drenaje
pleural. Al 4to dia se retira drenaje pleural y a las 2hs
comienza con signos de descompensación hemodinámica,
taquicardia, taquipnea, y desasosiego que mejora con el
decubito. Se solicita R.X. de tórax y ante la sospecha
de luxación cardiaca, T.A.C. de torax. Se decide
re-intervención del paciente comprobándose
luxación cardiaca, reintroducción del corazón
en saco pericardico, rafia pericárdica con apertura
inferior de 2cm.,drenaje pericardico y nuevo drenaje pleural.
Buen evolución, alta al 7mo día.
Conclusión: Si bien esta complicación es
poco frecuente, debido a la experiencia vivida es importante
el cierre casi total pericardico, con drenaje, luego de
su apertura.