Antecedentes. El trasplante de páncreas vascularizado
asociado al trasplante renal (TSRP), es considerado en la
actualidad el mejor tratamiento para la diabetes insulinodependiente
con insuficiencia renal terminal (DBT-IRT), pese a que existen
complicaciones quirúrgicas asociadas con este procedimiento.
Objetivo. Describir nuestra experiencia con relación
a la técnica quirúrgica utilizada, las complicaciones
quirúrgicas que se presentaron y el tratamiento de
las mismas.
. Hospital privado universitario.
Diseño. Descriptivo, retrospectivo.
Población. 29 receptores DBT-IRT (14 mujeres y 15
hombres) fueron trasplantados entre 1994 y 2004. Edad promedio±DS
de donantes y receptores: 23±7.5 y 33±5.2
años, respectivamente.
Método. Se efectuó: TSRP, de donantes cadavéricos,
con drenaje endocrino sistémico (vasos iliacos) y
exócrino a vejiga (25 casos) o enteral (4 casos).
Las complicaciones quirúrgicas se clasificaron de
acuerdo a su relación con: 1) la ablación,
2) la cirugía de banco, 3) el implante, y 4) de aparición
inmediata con necesidad de re-laparotomía dentro
de los tres primeros meses post-trasplante.
Resultados. De los 29 pacientes trasplantados, 12 requirieron
reintervenciones (41,2%), en quienes se efectuaron 22 re-laparotomías.
Once pacientes corresponden al grupo que recibieron trasplante
con drenaje exócrino vesical y sólo uno al
de drenaje enteral. Las complicaciones más frecuentes
fueron las de tipo 4 de nuestra clasificación.
Conclusión. Si bien la frecuencia y severidad de
las complicaciones quirúrgicas, habitualmente relacionadas
con el tipo de derivación exócrina, fue proporcional
a una supervivencia menor, el TSRP es un procedimiento seguro
para la mayoría de los pacientes, con altas posibilidades
de quedar libres de insulina y diálisis.