Antecedentes |
El trauma de los miembros afecta con determinada frecuencia las estructuras vasculares vecinas. La injuria penetrante asociada es causa importante en este tipo de lesiones. El tiempo transcurrido entre el compromiso vascular y la reparación quirúrgica tiene incidencia en el salvataje del miembro afectado. |
objetivo |
Evaluar la utilidad de los signos clínicos de alarma vascular en el ingreso hospitalario del paciente para la decisión del momento quirúrgico. |
MARCO DE REFERENCIA |
Hospital Municipal de Agudos, Servicio de Guardia General |
DISEÑO |
Análisis retrospectivo de casuística hospitalaria |
POBLACIÓN |
Desde enero de 1998 a enero de 2003, 5000 pacientes ingresaron a la guardia con traumatismo de miembro. Las lesiones fueron penetrantes en 85 y se originaron lesiones vasculares graves en 45 de ellos. Este grupo se utiliza para el análisis. El género masculino representó la mayoría con 38 pacientes. La edad promedio del grupo fue de 32 años con rango de 7 a 14. |
MÉTODO |
La presencia de uno de los signos de alarma indicó el tratamiento quirúrgico de inmediato. La ausencia impuso la resolución diferida del cuadro. Los mismos fueron: 1) disminución de la temperatura del miembro, 2) ausencia de pulsos, 3) palidez o cianosis distal, 4) sensibilidad o motricidad alterada y 5) fractura o herida en trayecto vascular. Se analizaron resultados de permeabilidad de la reconstrucción arterial y fracaso con pérdida del miembro afectado. La técnica incluyó la sutura directa arterial y la confección de injerto venoso de derivación cuando la extensión de la lesión lo hizo necesario. |
RESULTADOS |
De los 45 pacientes, 38 (84,8%) presentaron signos de alarma. Se trataron 23 con oclusión/sección, 21 con seudoaneurismas y 1 con FAV. En este grupo, se realizaron 28,9% de aretriografías. Hubo una amputación en este grupo. En forma diferida fueron tratados 7 pacientes con 2 amputaciones, una de ella de menor jerarquía.
La permeabilidad primaria de la reconstrucción vascular se observó en 43 (95,5%) de los casos tratados en forma inmediata o programada |
CONCLUSIONES |
La utilización de signos clínicos de fácil obtención en la guardia fueron útiles para decidir la reparación vascular inmediata y permitieron obtener resultados adecuados en las reparaciones tardías. |