TEMAS LIBRES
Cirugía General Paredes abdominales

TITULO: HERNIOPLASTIA INGUINAL POR VÍA LAPAROSCÓPICA ¿ES FACTIBLE EVALUAR SU IMPACTO EN LA CALIDAD DE VIDA?


AUTORES: MARÍA ELENA PEÑA, NICOLÁS DREIFUSS, NICOLÁS BONANNO, CASTRO FUENTES MARÍA BELÉN, EMMANUEL EZEQUIEL SADAVA

Nº DE REFERENCIA 15436

TIPO PRESENTACION: Temas Libres

CATEGORIA: Cirugía General

SUBCATEGORIA: Paredes abdominales

RESUMEN DE LA PRESENTACION: 

ANTECEDENTES: El abordaje laparoscópico para el tratamiento de la hernia inguinal bilateral, combinada o recidivada forma parte de los estándares de cuidado en la actualidad. En la última década se incrementó el interés en la evaluación peri-operatoria de la calidad de vida. Sin embargo, existe escasa evidencia en nuestro medio de su implementación. 

OBJETIVO: Evaluar por medio de una herramienta objetiva el impacto en la calidad de vida de los pacientes operados de hernioplastia inguinal por vía laparoscópica.

DISEÑO: Descriptivo, observacional y retrospectivo sobre una base de datos cargada prospectivamente.

MATERIAL Y METODO: Serie consecutiva de pacientes de un hospital de comunidad operados por hernioplastia inguinal laparoscópica entre 2013 y 2017. Se analizaron datos demográficos, variables intraoperatorias y recurrencias. Se realizó una encuesta de calidad de vida (EuraHS-QoL) que evalúa dolor inguinal, restricción de actividades y disconformidad estética en escalas del 0 al 10 en el pre y postoperatorio (1 y 6 meses). Se realizó un análisis a largo plazo con foco en dolor crónico y tasa de recidiva.

RESULTADOS: En el periodo de estudio se operaron 360 pacientes. Se realizó un total de 232 (64%) plásticas bilaterales y 128 (36%) plásticas unilaterales. Doscientos (55%) pacientes respondieron la encuesta. El 91% fueron hombres con edad promedio de 59 (22-90) años. El índice de masa corporal promedio fue 26 (15-40) kg/m2. El motivo de consulta más frecuente fue tumoración en región inguinal (41%). El 66% de los pacientes presentaba ASA II y la mayoría fueron no fumadores (80%). El tamaño promedio de los defectos herniarios fue 3,8 (2-10) cm. El promedio de dolor inguinal, restricción de actividades y disconformidad estética en el preoperatorio fue 5.9/30, 8.2/40 y 2.6/20, respectivamente. Todos los puntajes descendieron en forma significativa luego de la cirugía (2.6/30, 3.5/40 y 1.7/20, respectivamente p<0.01). El 90% de los pacientes se demostró satisfecho globalmente. Para un periodo de seguimiento promedio de 16 (6-56) meses se registraron 18 recidivas (3%) y a pesar de que presentaron peores índices en calidad de vida, no se obtuvieron diferencias significativas respecto de los no recidivados (p=NS). 

CONCLUSIONES: Luego de la plástica inguinal laparoscópica, los pacientes presentan una mejoría significativa en su calidad de vida a corto y mediano plazo. La implementación de una encuesta de calidad de vida brinda información objetiva del resultado quirúrgico y debería considerarse como herramienta estándar.






 


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