LA TRANSPIRACION EXCESIVA NO ES NORMAL Y SE PUEDE TRATAR | DR. GUSTAVO LYONS
La hiperhidrosis es un trastorno por el cual el cuerpo transpira más de lo que necesita para regular su temperatura. Es un desorden que impacta negativamente en la calidad de vida, pero se puede tratar.
La hiperhidrosis es un trastorno que provoca exceso de sudor o transpiración de manera espontánea y en cantidades muy superiores a las necesarias para cumplir con su función principal, que es la regulación de la temperatura corporal.
Es un trastorno de origen genético que puede aparecer durante la pubertad. Si bien no genera, ni predispone a ninguna enfermedad, deteriora notablemente la calidad de vida de quienes la padecen y hasta puede condicionar la elección del tipo de trabajo, la vestimenta y la participación en actividades sociales.
Aproximadamente el 3 por ciento de la población padece de hiperhidrosis y afecta por igual a hombres y a mujeres. Comienza a manifestarse en la infancia y la adolescencia, encontrando su máxima expresión en adultos jóvenes. En la mitad de los casos, se reconocen antecedentes familiares.
Gustavo Lyons, especialista en cirugía torácica y miembro de la Asociación Argentina de Cirugía, explicó que existen dos tipos de hiperhidrosis. La primaria, provocada por un exceso de actividad del sistema nervioso simpático, que estimula la sudoración en forma espontánea y desproporcionada. Y la secundaria, cuando la sudoración se debe a otros trastornos como disfunciones de la glándula tiroides, infecciones, diabetes, tumores, menopausia o ciertos fármacos.
Respecto de los tratamientos posibles para este trastorno de salud, Diego Angelillo, cirujano de tórax y director médico de Red Hiperhidrosis, explicó que en los casos cráneo faciales y palmoplantares la intervención quirúrgica tiene una tasa de satisfacción del 70 y 99.9 por ciento respectivamente. Para la hiperhidrosis axial, en tanto, desde hace unos años se está aplicando toxina botulínica como una alternativa que brinda los mismos resultados, sin la necesidad de pasar por el quirófano.
Cuando se aplica toxina botulínica en el espesor de la piel de la zona axilar, se genera una notable disminución de la sudoración, experimentando el paciente un cambio en su calidad de vida. El tratamiento no interfiere con la depilación ni requiere cuidados posteriores. Se realiza en una sola sesión de 15 minutos en el consultorio y los resultados duran alrededor de seis meses.
Zonas afectadas
El 66% de los casos es en los axilares.
El 32% en las palmoplantares.
El 1% son cráneofaciales.
El 1% en tronco y otras localizaciones.
Síntomas
» Sudor considerablemente, más que la mayoría de las personas.
» Como mínimo, un episodio de sudoración excesiva por semana.
» Antecedentes de hiperhidrosis en la familia.
» Sospechas de un proceso médico subyacente.
Prevención
* Evitar las comidas especiadas, el alcohol y el café.
* No exponerse al sol.
* Vestir ropa con fibras naturales, como el algodón.
* Optar por la ropa clara, o muy oscura, para ocultar los signos de sudoración.
* Los forros protectores para axilas constituyen también una opción.